Optimización de los recursos (se evitan impresiones innecesarias, duplicidad de documentos, etc.) y reducción del espacio físico dedicado a archivar papel.
Reducción de tiempo en consultas y tareas de archivo.
Automatización de procesos, reducción de tareas y actividades manuales, permitiendo destinar personal a tareas que aporten más valor.
Acceso instantáneo a toda la documentación necesaria para la actividad de cualquier organización, e integración con otras aplicaciones de gestión como ERPs, CRMs, etc.
Seguridad adicional a varios niveles, desde el acceso de usuarios a la documentación hasta la propia seguridad en el documento; acceso y manipulación por perfiles de usuario, estrategia de recuperación de datos ante desastres (copias automáticas, protección de documentación crítica en papel, etc.).
Cumplimiento LOPD, certificaciones ISO, etc.